En un tema recurrente en la actualidad de la industria del anime, los productores primarios de este medio están sufriendo monetariamente.
Animadores de diversos niveles de experiencia han estado expandiendo sus horizontes, al tomar en consideración el trabajar para productoras chinas en lugar de las compañías de animación japonesas.
Un extenso reportaje del portal PRESIDENT Online (con traducción de Somos Kudasai) develó que una hilera de compañías de animación chinas han encontrado un nicho de contrataciones en Japón, ofreciendo sueldos sustancialmente más altos que el estándar de la industria del anime.
El razonamiento presentado para que esta situación ocurra es de varios niveles. En primera instancia la demanda de China por más contenido de anime se incrementa de manera constante a cada año que pasa. Pero Japón ha colocado más restricciones para la difusión de contenido producido en su territorio, haciendo que las distribuidoras chinas apuesten a otro enfoque.
Fundando estudios de animación propios y ofreciendo contratos mejor remunerados que los de la industria del anime actual, han logrado crear un punto de arranque para tener producciones propias sin tener que lidiar con intermediarios incómodos.
Como suele ser común en este universo, las megacorporaciones de China están presentes, con Tencent, representada por su filial China Literature, creando la división Colored Pencil Animation Japan, un estudio de anime en toda regla.
Ofreciendo sumas de hasta 175 mil yenes (poco más de 1600 dólares) por contrato a animadores novatos, con mejoras salariales a personas con experiencia en el medio, además de tiempos extra remunerados y horarios flexibles de trabajo.
Puestas de esta manera, estas condiciones son muy seductoras para cualquier animador del medio, dado que sus contratos suelen ser mucho más bajos en la industria, con exigencias y expectativas mucho más altas.
Al final del día esto es endémico de una industria que no ha encontrado la manera de sostener a sus trabajadores más importantes, un tema que deberán resolver para sobrevivir.
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